El pescaíto frito es uno de los platos más aclamados de Andalucía, especialmente en zonas costeras como Huelva, Cádiz o Málaga. Aunque con los congelados y preparados de Congelados de Diego es posible disfrutar del mejor pescado para freír incluso si no tienes acceso a pescado fresco a diario. 

Después de leer este artículo sabrás cómo elegir el mejor pescado para freír y cómo sorprender a tus comensales con un pescado frito crujiente y sin exceso de aceite. 

¿Cuáles son los mejores pescados para freír?

Aunque para gustos, colores, hay una serie de productos que quedan espectaculares en su versión ‘frita’. A grandes rasgos, a la hora de adquirir un pescado para freír tendremos en cuenta lo siguiente: 

• Los pescados blancos son muy buena opción. Ya que al no tener casi grasa tienen una textura más firme. Esto los hace más fáciles de manejar para enharinarlos o sumergirlos en tempura. Aunque hay algunas excepciones, como puede ser el salmón.
• Los pescados de menor tamaño, como los boquerones, también son una buena opción para freír. Además, son ideales para tomar de un bocado. 
• Otro aspecto importante es que la carne del pescado para freír aguante jugosa con la alta temperatura del aceite. En este sentido, destacan pescados deliciosos como la merluza o el rape. 
• El pescado fresco aporta un sabor muy sabroso, pero también obtendrás unos resultados espectaculares con pescado congelado de buena calidad, como el que puedes encontrar en Congelados de Diego, tu distribuidor de congelados en Málaga. En este caso, lo más importante es descongelar el producto previamente por completo y secarlo bien. 

En definitiva, si quieres conseguir el mejor resultado de tu fritura de pescado te proponemos apostar por los boquerones, anillas de calamar, salmonetes, gambas, merluza, lenguado, bacalao y pescadilla. 

Trucos para una fritura crujiente y sabrosa

Ahora que ya sabes qué pescado elegir, aquí van algunos trucos prácticos que te ayudarán a que tu pescado frito quede crujiente y sabroso. 

• Seca bien el pescado. Antes de rebozarlo o pasarlo por harina, es fundamental eliminar toda la humedad posible. Utilizar papel absorbente evitará que el rebozado se despegue o que el pescado se cueza en lugar de freírse, logrando así una capa más crujiente y uniforme.
• Porciones uniformes. Para que el pescado se enfríe de manera homogénea, asegúrate de que todas las piezas tengan tamaños similares. Así, todas se cocinarán a la misma velocidad y evitarás que algunas queden crudas o excesivamente doradas.
• Elige el rebozado ideal. Un rebozado ligero es clave para lograr esa textura crujiente. Puedes usar harina de garbanzo, ya que ofrece una capa fina y doradita sin volverse pesada. Si prefieres un toque diferente, puedes mezclar un poco de harina normal con especias que realcen el sabor, como pimienta o pimentón.
• El mejor aceite para freir pescado. El aceite es otro de los factores decisivos para conseguir un pescado frito triunfador. El aceite de oliva virgen extra es la mejor opción, aunque también puedes usar aceite de girasol si buscas un sabor más neutro. Es importante que el aceite esté bien caliente, entre 180°C y 210°C, para que el rebozado se selle rápidamente y no absorba demasiada grasa. Si el aceite está demasiado frío, el pescado quedará aceitoso; si está muy caliente, se quemará por fuera y quedará crudo por dentro.
• Fríe en tandas pequeñas. No intentes freír demasiadas piezas a la vez. Al sobrecargar la sartén, la temperatura del aceite baja y el pescado no se dora correctamente. Lo mejor es freír en pequeñas tandas para mantener una temperatura constante y obtener un resultado crujiente.
• Escurre bien el pescaíto frito. Una vez que saques el pescado del aceite, colócalo sobre papel absorbente. Esto ayudará a eliminar el exceso de grasa y mantener la textura crujiente durante más tiempo.

Conclusión

Elegir el pescado correcto y aplicar estos trucos te permitirá disfrutar de un pescado frito dorado, crujiente y, sobre todo, delicioso. 

Desde Congelados de Diego te lo ponemos muy fácil para que te luzcas en la cocina con un pescaíto frito para chuparse los dedos. Contacta con nosotros y descubre nuestros productos congelados en Málaga.